lunes, 15 de octubre de 2012

Poema XLI

SOLEDAD AMANTE







Mientras te habito,
esposa y fiel amante,
luz y daño, sombra y gozo,
dulcemente, se reparten.

Mi corazón
tan pronto, cruel, has roto
simulando un abandono,
como al poco lo has llenado,


tierna y nutricia,
límites traspasando
—si límites él tolera,
de sí libre, enajenado—


con tu fingido
regreso y tu presencia.



Septiembre de 1994

domingo, 14 de octubre de 2012

Amor y soledad

No es tan terrible estar solo. Nada tiene de terrorífico, en sí mismo, el hecho de hallarse a solas en las más diversas circunstancias o en uno u otro lugar. Lo verdaderamente terrible y angustioso, aquello capaz de causar espanto e inquietud sin límites en nuestra alma, es el sentimiento íntimo y subjetivo de la soledad